En estos días estoy ocupada con muchas cosas buenas y lindas, sueños que quieren hacerse realidad... el fin de semana recibimos la visita de Belén, Agos e Inés (las hermanas de S. más la amiga del alma de B.), estuvimos todos un poco mejor juntos, S. disfrutó mucho y se portó muy bien, leáse: no se encaprichó, se fue a dormir sin chistar, las chicas dicen que es un niño bien-educado. Yo creo que simplemente es producto del amor y la atención de sus papás, particularmente de su orgullosa mamá. La otra novedad es que estamos buscando una Casita para comprar, imaginense que e-mo-ción por fin un poco de pasto! por fin algo propio, por fin.
Este verano en nuestros viajes sentí la diferencia de estar en una casa, que la puerta da a la calle y no a un palier oscuro, con los cimientos sobre la tierra. Quiero que mi hijo viva en una casa con patio, que vea cómo las plantas crecen en la tierra y no solamente en macetas hechas por la mano del hombre, que la perra se revuelque en el pasto que tanto le gusta, que tomemos sol, armemos la pelopincho, nos ahorremos expensas y alquiler y con ese ahorro nos vayamos a Brasil el verano que viene. Otro deseo muy profundo que tengo lo dejo para más adelante, por ahora son muchas cosas.
martes, febrero 20
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